2010-05-13

2238. ROBIN HOOD


La figura de Robin el Encapuchado se pierde en la noche de los tiempos. El siglo veinte y lo que de él heredamos lo conoce gracias a la reinterpretación romántica y la visión de Hollywood que lo enclava por fin en un periodo concreto y lo convierte en un tipo en mallas, el primer guerrillero forestal de la historia. Alegre, vital, rebelde y acrobático. Cualquier revisión que se ha hecho en el cine viene lastrada por la imagen que esbozó Douglas Fairbanks y llevó a su cenit Errol Flynn. Sean Connery lo mostró calvo y viejo, Walt Disney ensayó una visión con animalitos, Kevin Costner lo convirtió en epígono de John F. Kennedy, y hasta ahora (para mí) es la serie televisiva "Robin of Sherwood" la que mejor refleja la rebeldía y el anarquismo intrínseco del personaje.

Ahora Ridley Scott nos muestra su versión. Una versión que no parte de la leyenda, sino de la historia. El naturalismo es la evolución del realismo, no del romanticismo, y por eso nos cuesta tanto trabajo ver cómo un héroe romántico se ensucia, sangra, y nos muestra una Edad Media que no tiene las luces ni las texturas de las visiones pre-rafaelitas.

Scott, un cineasta que nunca ha superado el listón que él mismo plantó con sus tres primeras películas (y que tiene un hermano menor que, para muchos, lo ha superado ampliamente) coge la figura del héroe rebelde y la cuenta como si fuera nueva. Es decir, no nos cuenta la historia de siempre, sino que hace girar su relato en torno a la firma (y luego renuncia) de la Carta Magna por el rey Juan; o sea, eso que los ingleses tienen todavía como simulacro de Constitución. Mezclar ese momento histórico con la leyenda del arquero, y hacer que ese arquero sea a su vez hijo de cantero (es decir, masón, y quizá un guiño a Los pilares de la Tierra) y esté en el meollo del asunto se complementa con una jugosa visión contemporánea en estos tiempos de crisis, subidas de impuestos y causantes de la crisis que escapan tan de rositas como los reyes y nobles que en esta historia diezman al pueblo.

La película es larga y sin embargo se hace corta. Y se hace corta porque te quedas con ganas de más: si me anuncian que es el principio de una trilogía, o que se está preparando una segunda parte (que de momento parece que no), yo reservaría ahora mismo mi asiento en el cine. Scott nos muestra un héroe cansado y harto de guerras, un Ulises que vuelve a una Itaca que no es suya, donde una Penélope que no es suya atiende lo que le queda de honor y de tierras. El personaje de Russel Crowe se llama Robin Longstride, quizá para dejar claro de dónde viene Aragorn, y con cierta retranca y cierta sabiduría narrativa el director y sus guionistas son capaces de unir los dos orígenes del personaje, el noble y el popular, como ya hiciera la mencionada Robin de Sherwood, en un juego de usurpación de personalidades que recuerda aquella vieja película de Alan Ladd, Marcado a fuego, y a Sommersby. Que Crowe podría interpretar con los ojos cerrados a Ulises me parece casi un punto obligatorio en su carrera.

Se agradece que la película no vuelva a contar el enésimo enfrentamiento con Little John en el tronco y con los palos, y que presente a sus compañeros Alan-a-Dayle, Will Scarlett y el mismo Friar Tuck sin incidir en quiénes son y en cuál es su leyenda. Este Robin es pícaro sin ser histriónico, valiente sin ser temerario, sabio sin tener que fruncir el ceño. Y encuentra a la Marion ideal, la Marion perfecta, encarnada por una Cate Blanchett independiente y aguerrida, una noble de segunda fila no muy distinta del pueblo con el que se confunde. El juego de roces y caricias interrumpidas entre Robin y Marian es lo mejor de la película.

Casi como si fuera un Robin año cero, la película casi esquiva el personaje del sheriff de Nottingham, igual que prescinde de la figura redentora de Ricardo Corazón de León, mostrado aquí como un rey guerrero y estúpido que muere en batalla (espectacular, por cierto) en los primeros minutos. Hollywood ha mitificado demasiado la figura de un mal rey que ni siquiera hablaba inglés (era francés a todos los efectos) y que en realidad no estuvo en Inglaterra más que once meses, contando todos los días en que pisó la isla. La visión que da la película de la monarquía, la iglesia y la nobleza, sin ser revolucionaria, se aleja de lo que hemos visto en otras ocasiones: Leonor de Aquitania (sabiamente acompañada por una lechuza) o William Marshall (sobriamente interpretado por William Hurt, un actor que merece mejor suerte y más reconocimiento del que tiene) tienen el contrapunto de los reyes jóvenes, Juan el inglés y Felipe el francés, que prepara un desembarco inverso de Normandía que bebe, y mucho, de Salvar al soldado Ryan. El malo remalo es un tal Godfried, interpretado por un Mark Strong que está aquí bastante mejor que en Sherlock Holmes, y a quien Marvel Productions debería contratar pero que ya para interpretar al Basilisco.

No es una película perfecta, en tanto las batallas cuerpo a cuerpo son borrosas, parece un pelín cobarde indicar que los recaudadores de impuestos son invasores franceses y no los hombres del rey, y en el fondo te quedas con ganas de que se incida en el tono alternativo y anarquista de Robin y sus hombres en Sherwood. Pero es una buena película historicista, con una buena banda sonora (la pega, que cuando canta Alan no es traducido siempre), y que me revalida en mi teoría de que Ridley Scott, como ya dejara entrever en El reino de los cielos, es fan de Prince Valiant: busquen ustedes los dos o tres guiños que hay al personaje y disfrutarán de lo lindo.

Se agradece que, para variar, alguien demuestre que Robin Hood tiene más de una historia que pueda ser contada.

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Comentarios

1
De: Anónimo Fecha: 2010-05-14 00:22

No la he visto, pero que hagan un esbozo algomás real de Ricardo, un rey mitificado hasta a extenuación como bien apuntas, me atrae.

Hace un tiempo un amigo me dio su particular visión (simplista, pero graciosa por lo opuesta a lo habitual): "al heredar Inglaterra pensó que era un vale para echarse una partida de street fighter con Saladino en la otra parte delmundo (conocido). Y encima el moro le dió plantón."



2
De: Juan Pedrero Fecha: 2010-05-14 00:26

A mi lo que más me ha gustado ha sido la ultima media hora, que es donde existe algo de emoción, el resto (desde el principio) es una conexión de anécdotas que no terminan de encontrar un hilo conductor sólido. Algo que sí me ha gustado es que no trata de desmitificar a los personajes, de humanizarlos, como acostumbra el cine actual, que trata de imbuir de dudosa veracidad a todas las leyendas. Aquí los malos siguen siendo unos cabrones de cuidado, aunque los buenos no son tan buenos, simplemente son creibles. Como he dicho, no se desmitifica y se continúa con la tradición, aunque actualizada, sin revisarla. Por desgracia, lo que se esperaba de Scott es lo que ha dado: imagenes perfectas (aunque en este caso le ha temblado un poco el pulso) y sustancia irregular. Seguiremos esperando esa otra obra maestra que quizás nunca llegue.



3
De: Yota Fecha: 2010-05-14 06:41

Gracias por la reseña, yo la iré a ver esta tarde y lo cierto es que la tengo muchas ganas.

Ya contaré que tal.



4
De: Rickard Fecha: 2010-05-14 08:20

Pues Ridley Scott, en una entrevista publicada en la revista "Dirigido por" confirma que sí hay prevista una segunda parte dependiendo de los resultados en taquilla de ésta. En esa segunda parte dice que mostraría como finalmente el rey Juan es obligado a firmar la Carta Magna siendo el propio Robin quien le obliga a firmarla.



5
De: Pedro Camello Fecha: 2010-05-14 10:45

¿Sale William Marshal? Genial, este mismo sábado voy a verla.

Sí, Ricardo Corazón de León no debía ser un lumbreras, pero no olvidemos que fue el único que logró vencer a Saladino en batalla y en inferioridad de condiciones, y más de una vez. Aunque luego no sirviera para nada.

Aunque es cierto que harta un poco volver una y otra vez a los mismos mitos. Estamos demasiado anglosajonizados, cualquier país europeo tiene Historia más que sobrada para hacer películas de este estilo, más interesantes. Pero no se hacen, claro.



6
De: Anónimo Fecha: 2010-05-14 12:24

Al rey Ricardo ya se le había puesto en su sitio en la deliciosa Robin y Marian.



7
De: INX Fecha: 2010-05-14 12:42

Es que Robin es eterno...si se sabe cómo contarlo...



8
De: INX Fecha: 2010-05-14 12:47

PEDRO: ¿Y que prefieres, historias europeas, leyendas que nunca mueren, o la nueva historia mitificada de USA, en plan "La Búsqueda" que nos la muestran como el paradigma de la sociedad ideal, la que a base de esperar, va teniendo sus propios mitos?



9
De: Pedro Camello Fecha: 2010-05-14 14:07

Me encantaría ver una película sobre Sertorio, por ejemplo.

O sobre la batalla de las Navas de Tolosa.

O sobre Teodorico el Grande mismo, yo que sé.

Lo que digo es que ya está bien de Robin Hood, que me gusta el cine épico pero si cambian de tema... Y no sé a qué te refieres, INX, con lo de la nueva historia mitificada de USA, pero a mí "La busqueda" no me interesa.

Por cierto, hablando de William Marshall, A ver cuando se estrena "Ironclad".



10
De: Juanma Ruiz Fecha: 2010-05-14 15:46

Pues a mí, la verdad, me ha parecido más bien flojita. Por una parte, porque soy de los que prefieren la leyenda a la (supuesta) realidad histórica, pero eso es subjetivo. Lo que no lo es tanto es que los agujeros de guión lastran la segunda mitad de la peli hasta hacer que roce el ridículo por momentos. Agujeros que, probablemente, se han producido en la sala de montaje, pero que quedan ahí como una mancha que embadurna todo.

La resolución del juego de identidades, por ejemplo, se queda en elipsis... de pronto, todos lo saben y a nadie le importa. La historia de amor, lo mismo. Todo se apresura como el adiestramiento de Paul Atreides en el Dune de Lynch, pero aquí, además de las prisas, surge la incoherencia, a base de elipsis, saltos y trompicones. Por no mencionar que el tonillo Gladiator es válido hasta un punto: ahorrarse la creación del personaje de Juan Sin Tierra calcando a Cómodo tiene su delito.

Lástima, porque en la primera hora de película sí que vi todas las virtudes que mencionas, pero la segunda mitad me hizo salir del cine con la sensación de haber visto una película, en el mejor de los casos, regular.



11
De: Eduardo Lopez Fecha: 2010-05-14 15:48

Joder, pues yo no pensaba ir a verla, porque la estand poniendo a parir por todas partes. Pero ahora me haces dudar, Rafa.



12
De: jmponcela Fecha: 2010-05-14 16:24

"...como finalmente el rey Juan es obligado a firmar la Carta Magna siendo el propio Robin quien le obliga a firmarla..."

¿Cómo era aquello...?

"En Santa Gadea de Burgos
do juran los hijosdalgo,
allí toma juramento
el Cid al rey castellano,
sobre un cerrojo de hierro
y una ballesta de palo."

Éste si que tiene un remake cojonudo.



13
De: Juan Fecha: 2010-05-14 16:54

Si Viriato fuera yanqui o inglés, ¿cuántas películas se habrían hecho ya sobre su vida y su guerra con los romanos? Si la única versión del Cid que tenemos (versiones animadas aparte) también la hizo Hollywood. Ay que ver cómo ignoramos nuestros mitos...



14
De: Mt Fecha: 2010-05-14 17:13

Todo lo que veo y leo sobre esta película me transmite un único sentimiento:

soopoooor



15
De: RM Fecha: 2010-05-14 17:23

Al rey Ricardo donde se le pone realmente en su sitio es en Robin of Sherwood. Lo interpretaba John Rhys-Davies, por cierto. Sallah, para entendernos.

Y era un hijo de puta que lo primero que hace cuando llega a Inglaterra es ordenar que maten a Robin, claro.



16
De: RM Fecha: 2010-05-14 17:25

La visión que la peli da de Juan Sin Tierra es prácticamente la misma de todas las películas, no la de Cómodo. No olvidemos que Juan era joven, el mimado, y que pasa a la historia por dos motes: Sin Tierra y Espada-Blanda, ya que no era un rey guerrero, como bien vemos en la batalla final.





17
De: CarlosP. Fecha: 2010-05-16 09:36

No es Robin Hood Año Cero....es Ultimate Robin Hood...con un crossover: Robin Hood vs Private Ryan.



18
De: Pepe Fotón Fecha: 2010-05-16 10:42

"Y era un hijo de puta que lo primero que hace cuando llega a Inglaterra es ordenar que maten a Robin, claro. " Bueno esa es la versión resumida, primero intenta utilizarle como recurso propagandístico, y cuando se le empieza a poner respondón, ordena su muerte.

Realmente un episodio excelente, solo por él merecería la pena ver toda la serie, que pierde bastante en la tercera temporada.

Desde niño soy un fan de Robin Hood, espero ver pronto la película. Curioso que ahora tenga que ser siempre un veterano de las cruzadas ¿no os parece tremena la influencia del Kevin Costner?



19
De: José Aguilar Fecha: 2010-05-16 11:13

Chapeu!. No puedo estar más de acuerdo. Esta entrada, además de certera, desde mi humilde punto de vista, está magníficamente escrita; algo que no abunda. Con frecuencia se opina por escrito, en prensa, en revistas especializadas, en blogs, en un tono literario aburridísimo e incluso deficiente. Es un placer leer opiniones, disfrutando de la redacción. Saludos.



20
De: EMPi Fecha: 2010-05-16 12:07

¿Mejor Tony que Ridley? La mejor de Ridley aparte de las tres primeras (Duelistas, Alien y Blade R...), no es Thelma y Louise?
Aclaremos estos aspectos tan intrascendentes y tan divertidos.



21
De: RM Fecha: 2010-05-16 12:24

Tony parece que tiene mejor pulso narrativo. Y tiene tres o cuatro pelis cojonudas: El último boy scout, Deja Vu, El ansia.



22
De: Anónimo Fecha: 2010-05-16 19:55

Tony tiene algunas pelis muy buenas, pero Ridley tiene varias obras maestras.
Lo que es cierto es que ambos tienen algunas horribles.
Este Robín está bien. Una versión realista del mito.Un pícaro que encuntra su pasado noble durante la historia. Nada nuevo pero sí bien contado.



23
De: Antoine Fecha: 2010-05-16 19:55

El último era yo, perdón



24
De: Mt Fecha: 2010-05-16 22:08

"¿no os parece tremena la influencia del Kevin Costner?"

Tremendisíma. Richard Lester ya estaba influenciado por él veinte años antes de que se rodara.

El robin Hood de Kevin Costner. Vaya truño.



25
De: Mt Fecha: 2010-05-16 22:09

El último Boy Scout es una de la sgrandes películas de acción de los ochenta.

Y si me vuelves a tocar, te mato.



26
De: Anónimo Fecha: 2010-05-17 11:38

También se le conocía como Juan sin madre...en el fondo da hasta pena...
PEDRO: Es evidente que si no te interesa "La Búsqueda", no sepas de que hablo cuando menciono lo de USA ;)
Lo de las Navas de Tolosa suena genial, secundo la moción ;)



27
De: INX Fecha: 2010-05-17 11:38

Perdón...el ánonimo es mio...



28
De: Ignacio Fecha: 2010-05-17 16:24

A mí el Robin Hood de Costner me gustó bastante cuando la estrenaron. Tenía muy buen recuerdo de ella hasta que me hice con ella en Blu-Ray y madre de dios... qué mal le han sentado los años.

El de Ridley Scott me ha gustado, pero creo que necesito echarle un segundo visionado para formarme mejor la opinión.

Saludos.



29
De: .Jack78 Fecha: 2010-05-23 13:58

Pues la de Costner es mi favorita de Robin Hood. Me encanta esa peli... (sorry)

Esta tengo muchas ganas de verla, pero tendre que esperar...




30
De: Rickard Fecha: 2013-03-06 09:36

Ayer por fin pude verla después de mucho tiempo. La versión que vi fue la "versión del director", que al parecer tiene 16 minutos más de metraje que la versión estrenada en cines, que no he visto así que mi comentario se refiere a ésta y no a la otra.

Dice Rafa que: "La película es larga y sin embargo se hace corta". Bueno, no sé cómo sería la otra versión y qué es lo que se añadió pero, en éste caso y a mi parecer, la película es larga y se hace larga, muuuuuy larga. Un rollo, vamos. Me pareció lenta y aburrida hasta decir basta.

Nunca me llegué a creer a Crowe como Robin Hood. Como ya ha dicho Juanma Ruíz, "el tonillo Gladiator es válido hasta un punto", todo suena a ya visto y eso le hace perder épica. Por no hablar del desembarco a lo "soldado Ryan", que tiene delito.

Coincido también con Juanma en que "la resolución del juego de identidades, por ejemplo, se queda en elipsis... de pronto, todos lo saben y a nadie le importa. La historia de amor, lo mismo. Todo se apresura, pero aquí, además de las prisas, surge la incoherencia, a base de elipsis, saltos y trompicones."

Y sí, da la impresión de que estaba pensada para tener una continuación pero me alegro de que no la hagan.