Antes que nada, por lumbrera, le respondo al señor Hartodetontos:
"Lo que no tienes derecho es a exigir si no contribuyes."
Desde el mismo instante en que usted le paga lo que le corresponda a Hacienda, ese dinero, métaselo en la cabeza, deja de ser suyo para pasar a ser de todos, y por lo tanto todos tenemos el mismo derecho a opinar sobre su administración por parte de las correspondientes autoridades y a exigir que se emplee del modo que mejor creamos. En eso consiste la idea, no en que existan ciudadanos de primera y segunda clase, según su poder adquisitivo, como parece que le gustaría (porque por esa misma regla de tres, supongo, y según usted, tendrá más derecho a quejarse y exigir prestaciones quien más contribuya, ¿no?). Parece mentira que todavía haya quien no se haya enterado de qué va la película, y se crea, por su dinero, más que los demás.
"Yo si crearia un ghetto, y si daria el toque de queda para evitar que los parasitos sociales se dediquen a dar por culo, a joder, a contaminar con sus mierdas y sus ruidos. No es una cuestion de moral, sino puramente estetica."
Pues tenga cuidado, no sea que a alguien no le guste su careto y lo encierre en una jaula, como a los monos del Parque Genovés. Que el criterio estético es lo que tiene, que todos tenemos uno, como los culos, y las opiniones.
"Y digo yo, ¿realmente hace falta una ley específicamente anti-botellón cuando ya tenemos leyes y regulaciones contra ese tipo de cosas como el vandalismo en la calle y demás? ¿No bastaría con hacer cumplir las leyes existentes? ¿Algo tan sencillo como estás de juerga como y donde quieras, pero en el momento en que te cargues una papelera, tu nivel de ruido supere X o te pongas a ensuciar la calle, vengo y te pillo por haber incumplido las regulaciones municipales al respecto que, supongo, en Cádiz como en otras partes existen desde hace años?"
Pues eso digo yo, que se aplicara la legislación vigente en cuanto a vandalismo, suciedad, y demás cuestiones, y se dejaran de cuentos. Pasa que con eso no les bastaba para eliminar el problema del ruido, que al final es la verdadera razón de la ley antibotellón, digan lo que digan, ya que si bien, en conjunto, todo el grupo de chavales reunidos en la plaza de turno sí que superarían los niveles permitidos, individualmente no, con lo que era difícil tomar medidas. Así que nada, nos sacamos una ley absurda de la manga, coartamos un poquito más las libertades, para tener al personal atado en corto, y listo. Todos a coger humedad al corral de la Punta.
"Ya hemos comentado hace unas semanas el absurdo de ejercer el derecho a la libertad... dejándote recluir en un ghetto."
Bueno, es que es eso, o la desobediencia de la ley, los altercados, los enfrentamientos violentos con la policía, como allá en Madrid, en Malasaña, hace un tiempo, etc... Y en ese caso los chavales son unos vándalos, y unos delincuentes, y unos terroristas, y yo no sé qué más, no como la generación anterior. Ahora bien, si no dicen ni mu, se joden, y se aguantan, son unos sumisos, unos rajados y unos corderitos... no como la generación anterior. A veces la generación anterior es algo difícil de contentar, y muy poquito comprensiva, tanto como acusan de ese mismo defecto a los jóvenes.
"Ni siquiera se te impide beber, sólo se te pide que lo hagas en un sitio habilitado (mil y un bares, la Punta, tu propia casa)."
Los bares, aparte de ser una opción considerablemente cara, cierran, por ley, a partir de determinada hora, y en ocasiones, como dije, ni pagando las correspondientes tasas se les permite prolongar ese horario.
La Punta está a tomar por culo de todo, completamente aislada y totalmente expuesta a las inclemencias del tiempo. Como alternativa a cualquier plaza de la ciudad (que los chavales no se ponían ahí por casualidad, sino porque estaba resguardado, rodeado de bares y otros locales, accesible y bien comunicado, etc...) me parece una verdadera mierda, qué quiere que le diga.
Y si yo me meto en mi casa a beber con los colegas a los cinco minutos tengo a los vecinos protestando porque estamos formando jaleo, y no olvidemos, aquí lo más importante es dormir, que para eso somos el país que inventó la siesta.
O sea, que...
"Pero yo sólo puedo descansar en mi casa."
Sí, bueno, porque a nadie se le ha ocurrido colocar en la Punta, en lugar de un botellódromo, un pabellón con camas para todos aquellos que deseen dormir pero no puedan por la movida. Qué absurdo, ¿verdad? Pues igual de absurdo, o casi, que mandar allí la movida, y nadie se lo ha pensado dos veces antes de hacerlo.
"Y si no te gusta, consuélate sabiendo que a mi no me gusta pagar impuestos, no me gusta el rey, y no me gusta que mi jefe me llame Quino."
No veo el problema en pagar impuestos; lo malo es cuando no se administran debidamente. Al rey yo lo echaba a patadas a la puta calle, junto con todos sus familiares, que ya está bien de chupar del bote. Y no se tome a mal lo de Quino, que no todos los días lo equiparan a uno (o así) con un genio argentino de la historieta y el humor gráfico.
"Y sin embargo trago con ello, y el mundo no se acaba"
Ya. Pero si surge la ocasión, pues protesto, que no servirá de nada, pero al menos me quedo a gusto, qué coño. Y con un poco de suerte hasta hago recapaticar a alguien y todo.
"Dudo que la mayoría de los gaditanos estén de en contra de la Ley Antibotellón. De hecho, se aprobó para conservar el voto de la mayoría de la ciudadanía."
Exacto. Y es que al final, queramos o no, sí que hay ciudadanos de primera, y de segunda, por lo visto; los que votan y los que no. Y si para solucionar un determinado problema hay que perjudicar a uno de los dos grupos, está claro a cual va a ser. Una vergüenza, vaya.
"Hablando de hoteles: anda que no tiene que tener mandanga venir al Hotel Playa (o al Spa nuevo) o al Francia París allá en San Francisco y encontrarte con el botellón debajo."
Bueno, si tanta categoría y tantas estrellas tienen esos hoteles no debiera suponerles problema alguno; sus buenas ventanas insonorizadas y sus buenos aires acondicionados que tendrán, a buen seguro, para que todos sus clientes puedan dormir como lirones.
"que deben informar de que hay normas (que no son descabelladas ni mucho menos)"
Pues ese es el problema, que hay normas que a mí sí que me parecen descabelladas.
"Pienso que hay dejación de funciones en ese aspecto."
Pues sí, dejando a un lado lo del ruido, la ley antibotellón también viene a paliar, en parte, la ineficacia de la policía, incapaz de controlar los efectos secundarios, por llamarlos de algún modo, del botellón. Y porque ellos sean ineficaces me tengo que ir yo al quinto coño a tomarme tres cubatas (si fuera al botellón y bebiera cubatas, digo). Tócate los huevos.
Un saludo.
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