La mala noticia de ayer tarde, imagino, la saben ya ustedes. Lástima. La indispensable Cárcel de Papel del amigo Alvaro Pons, por una de esas cosas de arte de mala magia que es esto de escribir en lucecitas, perdió ayer por accidente toda su base de datos, eso que era crónica viva desde hace unos cuantos años de la historia de las publicaciones de cómics, y hasta el pulso de muchos lectores de cómics en España.
Imagino la consternación de Álvaro, porque nosotros mismos la hemos sufrido aquí en alguno de los apagones de Blogalia, y aunque pudimos recuperar los artículos, se perdieron eso que es el fondo la sal de escribir para este medio: los comentarios. Justo ahora en que los debates de este agosto se volvían un escaparate y un espejo interesantísimo (en tanto Álvaro empezaba a colgar artículos sobre los mejores tebeos de la historia, lo que nos ha llevado a análisis jugosos en los comentarios), se nos va la luz y nos quedamos todos sentados en lo alto de una calabaza.
Así que ya saben: si saben ustedes cómo recuperar parte de lo perdido (creo que Álvaro tenía backups hasta mayo), pónganse en contacto con la Cárcel y reintegren por favor todos esos artículos presos que nos daban a todos un poquito más de libertad a la hora de elegir nuestras lecturas.
Suerte, Álvaro, y que no decaiga. Siempre nos quedarán los cómics y en cualquier caso, como se dice, nos vemos en los funny papers. O en la Cárcel reestructurada.
Comentarios (7)
Categorías: Historieta Comic Tebeo Novela grafica